Ah sí, lo olvidaba, a lo que estamos, ahí va esa rima:
A LA MIERDA
Mierda, yo te saludo complacido
cuando sales patética y caliente
luego de abandonar en el crujiente
y alimentado cuerpo tu sentido.
Nada, sin tu calor, se ve nacido
ni sin verse en tu espejo es inocente,
mierda, pues nuestro fin es tu presente,
desecho, no, sino vivir cumplido.
Es tu fermento el que transforma en huerta
un universo lleno de intestinos,
danza de lo cocido y de lo crudo,
porque sin ti la tierra es tierra muerta,
solos y muertos todos los caminos.
¡Mierda, madre común, yo te saludo!
Whitman canto las excelencias de todo el cuerpo incluso sus interiores pero eludió algo que ahora Lizano ensalza para nuestro deleite. Alabado sea.
3 comentarios:
Descubro tu blog y comparto algunos gustos entre ellos el de la poética de Jesús Lizano.
Saludos.
Lisola.
Creo que usar el facil recurso de la escatología no te hará mas popular entre el pueblo llano. Prueba con otra cosa. Estas acabado.
Gora el Tibet.
Comparto tu aficion por whitman y su canto a si mismo.
Me ha gustado el guiño a tus noches de negro sobre blanco compartidas con la inigualable "tiene el cielo ganado" Belen, ya que en cierto modo me siento incluido en aquellas sesiones, no de cuerpo, pero si de alma omnipresente que por aquella epoca deambulaba entre sus tetas y tus narices.
Un saludo marinero del capitan. (mi capitan)
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